La decisión más importante cuando practicamos equitación es la protección de nuestra cabeza. Es la parte más importante de nuestro cuerpo y siempre debe estar bien protegida.
En este artículo os queremos ofrecer una serie de
recomendaciones para elegir un casco de equitación.
1 – HOMOLOGADO: es muy importante que reúna las
características que vienen detallada en la norma EN1384:2018 y las siglas CE.
Estas indicaciones tienen que venir en la etiqueta interna del casco.
2 – CÓMODO: Cuando nos probemos el casco debemos moverlo
hacia delate y hacia atrás y de manera lateral y comprobar que es cómodo y
estable.
3 – TALLA: Elegir un casco de nuestra talla que ajuste
perfectamente en nuestra cabeza para evitar que se desplace en los diferentes
aires del caballo.
4 – SEGURIDAD: Evidentemente si cumple la normativa que
hemos señalado debe ser sólido y resistente.
5 – VISERA: Debe ser corta, blanda y flexible, que
proorcione un amplio campo de visión.
6 – RIGIDEZ LATERAL: Que sea capaz de absorver los posibles
impactos laterales.
7 – VENTILACIÓN: Comprobar que tenga un buen sistema de
ventilación que permita la transpiración de la cabeza.
8 – PRECIO: Los precios de los cascos varían según las
características aportadas por el fabricante: materiales más ligeros, sistemas
de ventilación, materiales más resistentes al impacto, almohadillas más
cómodas, complementos para agregar en invierno, absorción de la lluvia, etc.
9 – VIDA ÚTIL: Con el paso del tiempo el casco pierde muchas
de las características iniciales, incluso cuando haya estado guardado en un
armario o cajón. La vida media de un casco son 5 años, pasado ese tiempo es
recomendable adquirir otro.
10 – SEGUNDA MANO: Debemos comprobar la homologación, la
fecha de compra inicial y que no ha sufrido daños por golpes o caídas que
comprometa su función principal de proporcionar seguridad.
MUY IMPORTANTE: La seguridad al practicar equitación es
fundamental y el mejor casco es aquel que nunca hemos comprobado su resistencia
por una caída.